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lunes, abril 14, 2008

Si...



Una campaña de Repsol nos sorprendió hace poco con un magnífico poema de Rudyard Kipling: Sí.

Ahora, espero me lo perdonéis, me permito retocarlo un poco para adaptarlo a la actualidad. A ver a qué altura averiguais a quiénes lo dedico:

Sí...

Si puedes mantener la cabeza sobre los hombros,
Cuando del tajo de la de los tuyos eres testigo,
Si sabes del verdugo hacerte amigo,
y en un alarde que cause asombro,
confundir tus pensamientos con los suyos.

Si puedes soñar, pero luego hacer lo que te conviene
si puedes pensar, sin que a tu discurso le envenene
si puedes tener principios, sin que tus hechos comanden.
Si el triunfo y la derrota no permites que te ablanden,
y los usas para medrar y elegir mejor tus aliados.
si eres honesto y honrado, pero nunca demasiado.

Si puedes tolerar que tus compañeros de destino,
tergiversen la verdad que has expresado,
y luego, con más acierto, confundir la del vecino.
Si logras decir lo que todos han esperado,
pero sin que nadie note que no es genuino,
sin que nadie vea que lo tenías ensayado.

Si puedes hacerte el loco y aguantar la quema,
cuando todos se dan cuenta de que la has cagado.
Y logras remontar y echarle a otro el problema.
Y conseguir apoyos, sin apenas un aliado.
Si no es en absoluto para tí un dilema
dejar al otrora amigo abandonado.

Si a la multitud manejas con desparpajo
y sin que se note que te importan un carajo,
besas niños, ancianos, tullidos sin desmayo.
Si puedes rellenar una hora de mitin sin ensayo,
con sesenta minutos de discurso vacío,
tuyo es el poder y los hombres tus vasallos
y, lo que es más, ¡serás un político, hijo mío!.