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domingo, diciembre 30, 2007

La última cena

Desde que anunciaron el cierre la empresa donde trabajo, Siemens Elasa, hace ya más de dos meses, hemos estado manifestándonos por las calles de Zaragoza, protestando bajo el eslogan de "No al cierre". Eso sí, cada protesta y manifestación, ya que estábamos en el centro, era seguida por el pincho o tapa correspondiente, que si sigue mucho esto de las protestas voy a acabar fondón. Menos mal que el comité de empresa piensa en todo y también hicimos una marcha de 17 Kilómetros desde la empresa a Zaragoza, para perder los kilos de los almuerzos extra.

Algunos, muy pocos, se han recolocado ya en puestos de Siemens en otras partes de España. Eso sí, el proceso es fulgurante, un día van a la entrevista, al siguiente dicen sí, y al tercero ya tienen que ir a trabajar a la otra punta de España. Más que recolocarlos, los abducen. Preguntas por fulanito y te dicen: "Si ya está trabajando en Logroño". Tengo la pesadilla de que un día llegaré a la empresa y seré el único allí, todos habrán sido ya abducidos, y de repente sonará una música de suspense y un potente foco me iluminará y noooooo!!!!..., y apareceré trabajando en Galicia.

Pero, semanita a semanita, ha llegado Diciembre y con ello la cena de navidad de la empresa. Así que, con el título de La última cena, convocamos el pasado día 20 a una cena tanto a colaboradores actuales como pasados. Se apuntaron más de 60 y el ambiente fue muy bueno.

Tras la cena, fuimos a tomar algo por ahí (la penúltima de la última...). Alguien propuso un garito por la calle Manifestación, lo que a todos pareció muy adecuado, dadas las circunstancias. Y allí que fuimos. De todas formas, los que tenemos hijos tampoco tenemos mucho criterio en la selección de garitos, ya que los que conocíamos cuando salíamos igual ya no existen, o ahora son bares gay. Y con mis colegas de Siemens sólo salgo últimamente a determinados garitos: la plaza España, el Ayuntamiento, la DGA, etc, conocimiento que sólo serviría para un botellón.

Varios bailoteos, y tres Caipiriñas más tarde nos quisieron cerrar el garito, pero hicimos uso de nuestra experiencia y coreamos el: "No al cierre"... nos hicieron el mismo caso que Siemens. A la puta calle y lloviendo.

Y ni un mal taxi que pillar...

2 ideas:

Miss Missing dijo...

Bueno, si te sirve de consuelo en Madrid durante la semana de las cenas de empresa no había ninguno tampoco.

Solo venía a leerte un poco y a desearte ¡¡Feliz Año!! Y bueno si te abducen, Dios no lo quiera que sé que estás muy bien Zaragoza, al menos si te abducen que te traigan por Madrid un rato, afán de saludarte!!.

Besos!!

Anónimo dijo...

Bueno pues si te abducen a Galicia, acuèrdate que por aquì hay un terremoto que estarà encantada de conocerte y exar una mano en lo que pueda.

Besitos sin abducciòn